BLOG 27102007 SEGUNDO MOMENTO
CAPITULO PRIMERO ANTONIO SUPREMO O EL PODER COMO FATALIDAD
Somos víctimas de la fatalidad.Pero de la fatalidad que nosotros mismos construimos.Siempre pensamos el destino así es: implacable. Que alguien o algo nos manipula inexorablemente y nos conduce a nuestro éxito o a nuestra perdición.Ingenuamente buscamos eludir nuestra responsabilidad. Aun cuando exista una dosis de suerte, de fortuna o de azar en la construcción de todo tipo de eventos las opciones que se toman o se dejan de tomar juegan un papel importante en la configuración del evento mismo.Tratándose sobretodo de eventos que marcan un fin de época. Como que se van construyendo pacientemente,sin prisas pero sin descanso.Con una pizca de episodios inesperados. Con decisiones que se toman o se eluden. Pero que como que no queriendo van configurando el contexto que termina por invitar a la develación del evento. Después cuando reconstruyes toda la cadena de actos que crees condujeron a ese desenlace parece que te cruzas por todas partes con los signos evidentes,las premoniciones que anunciaban ese y solo ese resultado.
Te dices que era ob-vio –así con prinuncian los mamones chilenos..Que así tenía que ser. Que cómo pudiste ser tan estúpido como para no percatarte de esos claros síntomas.. Te lamentas de lo irreductible de la fatalidad. Juan Linz[1] señala que las transformaciones de un régimen más que estructuralmente determinado, dependen de un proceso contingente en donde se presentan distintas salidas posibles. Además subraya que el factor decisivo en la coyuntura que determina el camino que se toma, es la dinámica de las élites políticas.
Todo empezó con discusiones politicamente correctas que nos llevaron a la parálisis .Mi papá planteaba como hipótesis de trabajo –eso decía y remarcaba- que un cambio en el marco constitucional de la sociedad requería de un consenso previo que permitiría construir gradualmente las bases para las reformas constitucionales..Operar en frío las reformas traería dos consecuencias al cual más perniciosa. Por una parte nuestros socios menores se sentirían traicionados y en consecuencia con fuertes incentivos para embarcarse en conductas desleales. Por la otra, y como consecuencia de lo anterior nuestros verdaderos enemigos –me refiero desde luego al bloque germano-coreano-chino- se animarían a entrar en la escena aliándose con los segmentos desleales de nuestra sociedad. Todo esto estaba meridianamente claro para nosotros y sobretodo para nuestro aliado principal Don Sam Chainsaw Leatherface Mart. Pero este pinche texano se le había metido entre ceja y ceja que se tenía que chingarse al Chachalacas Fernández un socio realmente menor pero que había osado recibir con una trompetilla el anuncio por demás excesivamente de mi padre anunciando hace unos años nuestra alianza estratégica
– Papá había dicho: hoy querido pueblo,es decir queridos accionistas, se escribe en letras de oro la que seguramente será la página más gloriosa del desempeño empresarial mexicano. La compra del Telefonica por el entonces Don Tercer Hombre Más rico del mundo y hoy Don Primer Hombre más Rico del Mundo, palidece ante esta hazaña de proporciones épicas. Mr. Sam y yo hemos decidido decir Basta y nos hemos echado a andar por las amplias avenidas que nos abre la innovación y el ingenio del verdadero emprendedor as oppose to the compadre capitalism como atinadamente lo denominó un premio Nobel de Economía cuyo nombre se me escapa.
El Jefe Supremo convocó a una sesión extraordinaria del Consejo de Estado.Asistimos todos. Desde luego mis dos hermanos,mi madre,mi tía la Gorda Elena, mi tío Pancho Pistolas,mis primos Hocicón,Huevón,Hubris y Homero Rodríguez-Benetton,mis sobrinitos Rodri,Ricki,Chava,Anapaola y Gus Coke-Astabuchurraga; los dos principales consejeros de mi padre: el Panucho Espinoza y el Curanto Echenique;el consejero espiritual de la familia el Turco Meniscos, el abogado general del consorcio Andy Ordenes Fujimoriy en representación del pueblo llano Ixca Tresfuegos,la Sarracena Venegas y desde luego la pérfida Lucrecia.
Os he convocado en un momento crucial para el país,el mundo y muy particularmente para nuestros bolsillos. Permítanme pintarles brevemente a grandes trazos algunos de los elementos que debéis ponderar al momento de evaluar el paquete de reformas estructurales que os propondré seguidamente
/Puxa que los grandes trazos nos van a llevar mas de una hora y yo tengo que salir im-pe-rio-sa-men-te en quince minutos, qué hago Daniel
Aguantate cabrón es lo menos que le debemos al viejo. Por lo demás a dónde tienes que salir im-pe-rio-sa-men-te Dandy
Tengo que ir a cuidar una parte decisiva de nuestras inversiones; nada menos y nada más la que nos permite mantener en el logo la palabra final MART
O sea te vas a culear a Sean
Podría decirse con un poco de onomatopeya pero tu haces aparecer todo de una manera sumamente vulgar. Digamos que voy a consolidar el ambiente pro-business de nuestro país y sus políticas públicas através del reforzamiento de los lazos de confianza entre los herederos del emporio Rediez S’il vous Plait Mart
No mames el heredero soy yo y más que reforzar los lazos de confianza nos puedes armar un desmadre si el Sean te descubre con el Pompougnac
Pero si el Sean trae una corte de amantes que Alejandro Magno en la versión Oliver Stone se quedaría corto
¡Daniel y Dandy, por Dios! Podrían intentar por un momento congelar su patética superficialidad y en un intento que comprendo en su caso heroico, poner un poco atención a lo que el viejo está planteando. Lo que está en juego es en verdad si este consorcio sigue siendo familiar o sí como lo ha planteado el avieso abogado Andy Ordenes evoluciona en un conglomerado por acciones. O para decirlo de una manera que hasta Uds puedan entender: bajo el manto de una sociedad por acciones nos quiere joder el viejo Sam Mart tu suegro pinche Dandy, pero através de interpósita persona en este caso el abogado Ordenes
Pero eso no puede ser Supremo,nosotros somos mayoría.
Fuimos mayoría como dirían el PRI en México: favor de repetir todos al unísono.
Escucha güey/
Los préstamos que tomamos en 1995 para avenirnos a la brutal crisis que provocaron los pleitos entre el Innombrable y nuestro presidente Premio Nobel de la Economía.
Ejem,perdón Don Rogaciano sólo porque el rigor histórico me compele a interrumpirlo: el presidente que es premio Nobel de Economía es el presidente Barlett de la serie televisiva West Wing no el Señor al que Ud se refiere que lo más que tuvo fue un certificado de secretaria bilingüe –nótese mi clara conciencia de género- en las academias de los Vasquez.
Bueno como sea, se sentía Premio Nobel. El caso es que nosotros los verdaderos constructores cotidianos y continuos de este país tuvimos que pagar los platos rotos y,como decía, para sobrevivir endeudarnos aún más para aguantar el ramalazo del tequilazo. Lo cual logramos con constancia y con esmero pero repito con deudas cuyos vencimientos comienzan a tener impacto en nuestras por demás sanas finanzas.
Aaay abuelito[2] pero eso no va a suspender nuestro tan ansiado y multicitado crucero por los fiordos nórdicos
[1] Toda la obra de Juan Linz debe ser leida
[2] Aunque en sentido estricto no es su abuelito sino su tío-abuelo; solo para simplificar les permito a mis sobrinitos llamarle abuelo
CONTINUARA LA SIGUIENTE SEMANA
No comments:
Post a Comment